La tecnología de información y comunicación está tomando más fuerza, y con ella las nuevas tecnologías que nos otorga novedosas herramientas que hacen de nuestras labores mucho más fáciles de realizar.

En el ámbito educativo también han reclamado su lugar, inundando las aulas de clases con pizarras digitales, ordenadores, tabletas entre otros dispositivos. Pero en este frenesí ha surgido una nueva tendencia educativa que promete revolucionar el salón de clases.

Anteriormente, la programación era exclusiva de aquellos diestro en la escritura de códigos, profesionales que lograron obtener sus conocimientos con años de estudios y preparación en este ámbito, todo con el objetivo de ingeniar programas útiles que faciliten el quehacer diario del humano.

Pero todo tiene sus comienzos, y esos mismos programadores tuvieron su primera oportunidad; alimentada por la curiosidad, desde niños de crear mediante los diferentes lenguajes informáticos, programas y dispositivos. Es por esa razón que ahora se enfocan esfuerzos para que aprendan a programar desde temprana edad.

La principal razón obedece a la creación de una generación de consumidores de contenidos, que a su vez sería su generador, sin necesidad de orientarlos exclusivamente al mundo informático.

Para lograrlo, se debe seguir tres premisas de la programación en la que define que debe ser: estructurada, organizada y metódica, valores que no existen en otras actividades, siendo sumamente esenciales en ese mundo para dar continuidad o evolución a las creaciones aumentando su complejidad.

Todo esto se engloba en lo denominado como “Pensamiento Computacional”, un término acuñado en el 2006 en referencia a la organización y estructuración de las ideas, principios que todo programador debe tener.}

La programación es una disciplina enfocada a la resolución de problemas, por lo que es necesarios forjar desde pequeños aptitudes para afrontarlos de una forma determinada, secuencial e interactiva. En otras palabras, de principio a fin, paso a paso.

El “Pensamiento Computacional” ha sido sometido a diferentes estudios durante la última década, en el que ha demostrado ser un factor clave para la formación de la personalidad relacionada con la lógica y resolución de problemas, pilares fundamentales de la programación.

Durante el proceso, el pequeño aprendiz se enfrentará a cambios que lo formarán como un eventual profesional en su área, siendo determinante intuir que en su campo requerirá del trabajo en equipo para la comprensión e implementación de nuevas ideas.

Con información de whatsnew.com